JugarFree: Fly For Fun

Fly For Fun

Volar es fun. ¿Pero lo es el monster bashing en exceso? Es la cuestión por la cual estamos interesados en comentar Fly for Fun (Flyff para los amiguetes). Ya que es un hecho: la erradicación de monstruos está en el centro de los juegos típicamente provenientes de Asia. Tanto que no se pierde el tiempo con tonterías, a los treinta segundos de juego, me abren un par de ventanas del tutorial y me mandan a partirme los dientes contra el primer monstruo en las afueras de la ciudad. ¿Y la historia de Flyff? Pues no hay mucho que contar, una guerra entre payasos y dioses de la que surge un universo ingenuo, caprichoso y delirante poblado de personajes manga delirantes de esos que tanto nos gustan.
En la linea de Dofus o de World of Warcraft, el estilo visual propio de dibujos animados de Flyff permite explicar mucho su éxito. El juego es técnicamente perfectible, pero dispone de un apartado gráfico seductor. Si estás dispuesto a dejar de lado la sangre y los mundos oscuros te gustará darte una vuelta por el ambiente mágico y dulzón, a la vez que escuchas temas musicales muy en la línea. Más claramente lo diremos, para ser un juego gratis, Flyff ofrece una realización totalmente convincente. El ciclo día/noche se ve incluso duplicado por un ciclo estacional del más bonito efecto que permite variar el ambiente. Una pena que la personalización de nuestro personaje (en el momento de la creación del mismo) se limite a la elección del género y el corte de pelo. Por suerte, la cantidad de equipamiento diferente que hay en el juego permite distinguir a un personaje de otro, de lo contrario siempre puedes ir al item shop y arreglarlo con la tarjeta Visa.
El segundo fuerte punto de Flyff es su accesibilidad. Bastan algunos minutos para tener el juego más que controlado, ganar algunos combates y pasar el primer nivel. El componente adictivo del juego hace el resto, la mecánica de juego se revela de tal eficacia que no se tiene interrupción de querer progresar siempre más lejos en un título que, bajo sus aspectos más clásicos, oculta su lote de novedades. Concretamente, el sistema de evolución de los personajes recuerda inevitablemente el de Ragnarok Online: simple vagabundo indeterminado al principio de juego, elige a partir del nivel 15 una clase entre cuatro (mercenario, mago, acólito y acróbata, cuatro arquetipos bastante comunes). Alcanzado el nivel 60, se especializa eligiendo una subclase (como ejemplo, el mago puede convertirse en elementalista o brujo).
El sistema de combate de Flyff es simple y convincente, incluso es probable que carezca de cierto dinamism. Cada personaje posee un ataque básico que es función del arma equipada, y dispone de competencias (skills) específicas de su clase. Estas competencias pueden conectarse unas con otras gracias a la acción slot, que permite desarrollar combos mediante la simple presión de una tecla. Los daños son función de un cuadro elemental, basta con seleccionar el punto de xp adecuado y encontrar la combinación de ataques y hechizos que optimizará el cociente tiempo de juego/experiencia acumulada. El aspecto de “parque temático lleno monstruos” de los escenarios y la longitud de un título que rechaza el leveling de alto nivel desalentarán a los grandes jugadores de mmorpgs.
Además de la posibilidad de agrupar personajes, podemos fundar o integrarnos en un gremio. Cada gremio puede declarar una guerra abierta a otra facción: sus miembros respectivos pueden entonces abrir fuego en cualquier momento y cualquier lugar. Para el resto, el pvp salvaje se regula en la medida en que se penaliza a los jugadores que se dedican a ello. Por consiguiente, es mejor irse a la arena a apaciguar nuestra se de sangre. Tras la primera parte del juego titulada “Renaissance” tendremos la posibilidad de ser acompañados por nuestra mascota, que nos ofrecerá bonus. Las búsquedas son poco numerosas y muy básicas en su realización. A eso hay que sumarle el problema de los monstruos, que nos obliga a abandonar el juego antes de seguir.
Además de los items de búsqueda y distintos objetos de renovación de vida y mana (hielos, zumo de frutas…), nos encontramos con que el equipamiento que podemos encontrar está restringido a una clase concreta, un nivel preciso y un género preciso. Si dejas el objeto en el suelo lo más probable es que algún monstruo que pase por allí se lo zampe.
En un registro más clásico, se pueden mejorar armas y armaduras, así como crear la de tus sueños; sin embargo, el sistema de Kraft es muy caro, para un resultado dudoso al menos, está claro que se enfoca a acudir a la shop y pagar. También es posible abrir una tienda y venderlos en una subasta como en Dofus; eso confiere mucha animación a las distintas ciudades del juego.
Flyff puede por otra parte basarse en su comunidad activa agrupada en torno a un equipo de animación eficaz; se organizan regularmente numerosos acontecimientos. En resumen, a pesar de contar con una jugabilidad muy básica, las funcionalidades de este MMOG son tan numerosas que casi se olvidaría mencionar el que da su nombre al juego: el vuelo. Es necesario saber que el mundo está formado por varias islas: Flaris, Saint Morning, Death Island y Darkon. Pergaminos de teletransporte permiten viajar entre ellas. Pero a partir del nivel 20, es posible obtener un nuevo modo de transporte: un objeto volador. En función de la clase puede tener forma de escoba, alfombra volador o de hoverboard. De esta manera podremos luchar contra enemigos aéreos y volar de isla en isla. Anecdótico pero refrescante, se trata de un buen videojuego para los que no quieran pagar una suscripción mensual.

Gráficos: 65/100El motor 3D muestra gráficos honestos en un estilo visual muy al estilo de los dibujos animados. Los escenarios tienen cierto aire al World of Warcraft y los personajes a Dofus. Es el estilo ideal para no envejecer demasiado deprisa.

Sonido: 65/100El valor de las melodías tiene que ver mucho con la percepción del usuario. No puede negarse que la banda sonora de Fly for Fun va perfectamente con el universo en el que se desarrolla la aventura. Sin embargo, los efectos sonoros resultan muy poco convincentes.

Jugabilidad: 75/100Muy bien pensados los contrles, la jugabilidad es simple y a alguno le parecerá simplista. Sin embargo la impresión final es positiva. Llegar a tener un personaje digno se convierte en todo un desafío.

Duración: 70/100Alcanzar el nivel 120 en Flyff es un reto que solamente los jugadores más perseverantes pueden llegar a conseguir. Los otros tienen derecho a dejarlo agobiados de matar a tanto monstruo. Un contenido alternativo en un mundo que crece con el desarrollo de nuestro avatar.

Valoración General: 75/100 La generosidad de esta nota general se ve afectada por la gratuidad de un juego de estas características. Demasiado centrado en el monster bashing, Fly for Fun no carece de calidad y tiene el mérito de aglutinar muy buenas ideas. Hemos tenido dificultades para dejarlo y ponernos a escribir esta reseña, lo cual habla positivamente de su nivel de adicción.
Además, desde hace un tiempo tienes Fly for Fun en español.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Un buen juego, con buenos gráficos y adictivo que más se puede pedir ... que sea gratuito, pues resulta que ya lo es, así que no dudes en probarlo.